Los discursos del odio atacan la dignidad de los integrantes de colectivos históricamente desfavorecidos y fomentan su discriminación y deshumanización, razón por la cual los poderes públicos se han ido dotando de mecanismos para combatirlo. Pero no hay unidad de acción a nivel global, pues su restricción exige revisar los límites a la libertad de expresión. Así, mientras en Estados Unidos los tribunales reconocen la primacía de esta libertad, en Europa se incrementa el recurso a la vía penal. Pero (...) ambos sistemas tienen deficiencias, sobre todo porque no se centran en el resarcimiento del daño causado. De ahí que pueda analizarse una tercera opción, la civil, partiendo de la ya consolidada doctrina sobre daños morales. (shrink)

Los discursos del odio atacan la dignidad de los integrantes de colectivos históricamente desfavorecidos y fomentan su discriminación y deshumanización, razón por la cual los poderes públicos se han ido dotando de mecanismos para combatirlo. Pero no hay unidad de acción a nivel global, pues su restricción exige revisar los límites a la libertad de expresión. Así, mientras en Estados Unidos los tribunales reconocen la primacía de esta libertad, en Europa se incrementa el recurso a la vía penal. Pero (...) ambos sistemas tienen deficiencias, sobre todo porque no se centran en el resarcimiento del daño causado. De ahí que pueda analizarse una tercera opción, la civil, partiendo de la ya consolidada doctrina sobre daños morales. (shrink)

Las tecnologías de la comunicación y la alfabetización digital pueden suponer factores de exclusión en colectivos vulnerables. Mediante una práctica de inclusión social diseñada en base a metodologías participativas, un equipo transdisciplinar ha ofrecido a un grupo de mujeres refugiadas en situación de especial vulnerabilidad un programa formativo que, dirigido al emprendimiento y a la inserción laboral, fomentaba la adquisición de habilidades digitales. Asimismo, se presenta una experiencia de Aprendizaje Servicio con alumnado universitario que ha favorecido la inclusión (...) social de las mujeres refugiadas en la universidad y la formación real de este alumnado de la educación reglada. (shrink)

En este artículo se reflexiona acerca de las situaciones discriminatorias que vivieron algunos colectivos como pacientes y ex-pacientes de COVID-19, personas de origen asiático y personal sanitario, durante los momentos más álgidos de la pandemia causada por la COVID-19. Se ofrecen una serie de aproximaciones teóricas al estigma para examinar diferentes situaciones discriminatorias experimentadas por los colectivos mencionados. Se identifican dos dinámicas estigmatizadoras principales: de segregación y de culpabilización. Las primeras vienen detonadas por la percepción de una «triple (...) amenaza» (física, emocional y moral) de las enfermedades infecto-contagiosas. Las segundas pueden entenderse mejor teniendo en cuenta las dinámicas de dominación que afectan a los colectivos vulnerables. Ambas pueden derivar en agresiones hacia los colectivos segregados/culpados. El conocimiento obtenido permite intuir algunas cuestiones que podrían ser problemáticas (con relación al estigma) en otras enfermedades, como es el caso de la mpox (viruela símica). (shrink)

By applying Mills’ notion of ‘collective memory’, Frost-Arnold argues that an excessive number of false beliefs online (fake news) can condition the memory that we share as a collective. Here I suggest, following Mill’s original characterization of ‘ignorance’, that the construction and maintenance of our collective memory is also vulnerable to some lack of or total absence of true beliefs online. I suggest we must investigate these beliefs attending to two issues: firstly, instances of knowledge that are underrepresented, and secondly, (...) non-propositional forms of knowledge. The first problem is addressed in section 1, where I explore different ways in which some beliefs might not reach the online sphere, due to their minoritarian status. The second problem is my focus on section 2, which entails the consideration of non-dominant forms of knowledge: knowledge-how and knowledge by acquaintance. Aplicando la noción de 'memoria colectiva' de Mills, Frost-Arnold argumenta que un exceso de creencias falsas en línea (fake news) puede condicionar la memoria que compartimos como colectivo. Aquí sugiero, siguiendo la caracterización original de ‘ignorancia’ de Mill, que la construcción y mantenimiento de nuestra memoria colectiva también es vulnerable a cierta falta o ausencia total de creencias verdaderas en línea. Propongo que debemos investigar estas creencias atendiendo a dos cuestiones: en primer lugar, a instancias de conocimiento que están subrepresentadas y, en segundo lugar, a formas no proposicionales de conocimiento. El primer problema se aborda en la sección 1, donde exploro diferentes formas en las que algunas creencias pueden no alcanzar el ámbito digital debido a su estatus minoritario. El segundo problema es el foco de atención en la sección 2, donde se consideran formas no dominantes de conocimiento: el saber-cómo y el conocimiento por familiaridad. By applying Mills’ notion of ‘collective memory’, Frost-Arnold argues that an excessive number of false beliefs online (fake news) can condition the memory that we share as a collective. Here I suggest, following Mill’s original characterization of ‘ignorance’, that the construction and maintenance of our collective memory is also vulnerable to some lack of or total absence of true beliefs online. I suggest we must investigate these beliefs attending to two issues: firstly, instances of knowledge that are underrepresented, and secondly, non-propositional forms of knowledge. The first problem is addressed in section 1, where I explore different ways in which some beliefs might not reach the online sphere, due to their minoritarian status. The second problem is my focus on section 2, which entails the consideration of non-dominant forms of knowledge: knowledge-how and knowledge by acquaintance. (shrink)

EL LIBRO QUE PRESENTAMOS nace a partir de un proyecto de investigación y cooperación financiado por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, Apoyo a la formación de formadores y de investigadores en educación en Centroamérica, en el campo de la Teoría de la Educación. El objetivo final del proyecto ha sido la creación de un Grupo Internacional de investigación en temas de Teoría de la Educación, formado por profesores de Facultades de Educación de Universidades centroamericanas y españolas. (...) Entre las numerosas tareas que se han encomendado a dicho grupo una de ellas ha sido la de elaborar un texto de Teoría de la Educación para uso de estudiantes de grado. Todos los miembros del grupo son profesores universitarios y, por lo mismo, se ven implicados en la necesidad de elaborar disciplinas académicas que presenten y organicen, de manera sistemática, campos de contenidos actualizados. Todos esos campos de conocimiento se refieren a problemas que la educación y la formación presentan y que la época histórica resalta como particularmente relevantes. Pero, también, cada uno de ellos matiza la consideración de esos problemas desde las necesidades de los colectivos humanos con los que se encuentra comprometido. Son esas necesidades las que proporcionan la perspectiva desde la que llevamos a cabo nuestros estudios e investigaciones que, a su vez, suponen el capital en base al cual cooperar con el grupo en la transferencia de conocimiento y de resultados desde un punto de vista global y, más particularmente, en la elaboración de este texto. De este modo, el grupo, y el texto que presentamos, ha quedado aglutinado desde el interés común por la investigación y la reflexión sobre las cuestiones que la formación de los seres humanos plantea en los diferentes contextos de actividad pedagógica en los que cada uno de ellos se ve profesional y académicamente envuelto. Desde cada uno de esos contextos, afloran preguntas que enriquecen la perspectiva global desde la que interpretar los fenómenos educativos. No tomar en consideración las sensibilidades que alimentan los contextos particulares de formación puede llevar a que el tópico de la globalidad, derivado de las nuevas formas de transferencia de información, potencialmente valiosas, induzca formas de exclusión, intelectual y socialmente perniciosas. Porque podría llevar a tratar de construir una teoría general sobre la educación en la que se marginan situaciones reales, historias formativas que, por quedar excluidas, parcializan la perspectiva general, desde la que la formación de los seres humanos debe ser interpretada, por responsabilidad cognitiva. Pero, también las urgencias reflexivas y prácticas locales pueden justificar dejar de lado problemas que empobrecen el horizonte intelectual de la investigación posible y el estudio posible. Dos de estas sensibilidades quedaron explícitas desde el principio en el seno del grupo y marcan el devenir del texto. La primera se ponía de manifiesto desde países latinoamericanos donde la lucha contra el analfabetismo, la elevación cultural de la población adulta, constituye un objetivo prioritario en vistas al desarrollo cultural y social de la población; desde ellos, la movilización cultural de la comunidad resaltaba la importancia de las políticas educativas denominadas informales y el poliformismo necesario de los sistemas de acreditación cultural. Ello implica, para la reflexión teórica global sobre la formación, que el concepto de educación informal adquiere una relevancia teórica que todavía no ha sido asumida suficientemente, aunque se haya generalizado el concepto de educación a lo largo de la vida. Así como la urgencia general de reconsiderar globalmente las formas de acreditación cultural y la necesidad de mecanismos flexibles de reincorporación a los sistemas formales. Globalmente se advierte la importancia del concepto de cultura sostenible, porque en todos los países se presentan graves problemas culturales, de una u otra naturaleza, que sobrepasan la capacidad de los sistemas formales, mostrando que la formación, en vistas al comportamiento participativo y responsable, debe ser asumida como compromiso de toda la Comunidad, como un carácter de la ciudadanía madura. Esto lleva a reinterpretar y expandir el propio concepto de políticas culturales y a expandir el concepto de gobernabilidad; porque la promoción de la calidad de vida de las comunidades no depende únicamente de las políticas económicas, dado que globalmente no pueden garantizar la calidad moral del compromiso ciudadano. La segunda sensibilidad se ponía de manifiesto desde los miembros del grupo que trabajan en entornos de discapacidad o en entornos vitales vulnerados: disminuidos físicos o mentales, sujetos que han padecido maltrato o condicionados por la enfermedad. Si la formación es un requerimiento vital de todos los seres humanos, ese requerimiento donde mejor refleja su urgencia es precisamenteen las situaciones en las que queda más aparente su vulneración; por limitaciones históricas, biológicas o sociales. Son esas situaciones las que muestran, descarnadamente, que la formación compromete el proceso general de la humanización posible de cada ser humano. Estas situaciones deben incorporarse a la perspectiva antropológica general sobre la educación, desde el principio y por principio. Son esas situaciones, también, las que ilustran, por principio, que el proceso de formación forma parte del género de las acciones humanitarias, cuya consideración es indispensable para un proceso de humanización sostenible. Y son esas situaciones, marginadas o escamoteadas en la reflexión global, y que, de una u otra manera, se entreveran en todos los grupos humanos, en todas las culturas, en todos los territorios, las que delatan los puntos críticos por los que la sensibilidad moral detecta los aspectos insostenibles de la cultura, porque desvelan la vulnerabilidad y la vulneración de la condición humana. Profundizar en las razones y en los argumentos que justifican en la condición humana la plasticidad, que hace posible la vida saludable, en sentido global y pleno, lleva a la mejor comprensión de las razones por las que la condición humana, las condiciones de humanidad de la vida de los seres humanos, es vulnerable y puede ser vulnerada. La reflexión teórica y práctica sobre la formación, sobre la educación, busca descubrir las condiciones reales, de posibilidad y de límite, en las que en cada caso el proceso de humanización es posible y el compromiso humanitario es realizable. La reflexión sobre la formación, que busca perfeccionar el comportamiento humano, no puede soslayar la realidad aparente y generalizada por la que muchos seres humanos endurecen su sensibilidad, generan el maltrato o se satisfacen con la maldad. Es esta globalidad de perspectiva por la que el Grupo de Investigación manifestó y manifiesta estar interesado; al ponerla de manifiesto, comprobó que para alimentarla racionalmente debía situarse en un contexto interdisciplinar. Comprobó que la necesidad de alimentarla era poco discutible; pero, también comprobó, al mismo tiempo, que el esfuerzo intelectual necesario para implementarla era enormemente exigente. Que, por responsabilidad cognitiva, el investigador de la educación debe fomentar la misma apertura, intelectualmente abierta, que fomenta en sus estudiantes cuando le propone formación integral. La investigación en teoría de la educación reclama profundizar tanto en los mecanismos y procesos implicados en las mentes que se forman; profundizar, depurar y actualizar los contenidos de la formación que se propone; profundizar, depurar y actualizar en la gestión de los escenarios sociales reales en los que la formación se promueve. Es abrumadora la tarea; pero, también es capaz de satisfacer la más exigente de las curiosidades intelectuales. Exige una actitud abierta para el estudio, aunque las exigencias metodológicas de la investigación requieran de precisión y especialización en los problemas. Acogidos estos objetivos para elaborar el texto, el Grupo de Investigación ha tomado conciencia de la pluralidad de las líneas de investigación en las que cada uno se encuentra comprometido y de la necesidad de la reconstrucción permanente de su personal perspectiva global, mediante el respeto y la consideración pluridisciplinar de las aportaciones de otros de cara a la elaboración del texto final que presentamos. Ha quedado patente en la reflexión colectiva del grupo que las urgencias de responsabilidad local y personal consumían tiempo de reflexión abundante y que, frecuentemente, las demandas de proximidad limitaban la perspectiva, incluso razonablemente. Al confrontar las perspectivas personales elaboradas desde posiciones locales y personales diferentes se pudo advertir que el macroscopio necesario para reflexionar la formación de los seres humanos, la perspectiva global desde la que considerar la formación de los seres humanos, ha de encontrarse en los formadores, en los investigadores de la educación, en permanente estado de construcción; precisamente por hacerse sensible a todas las formas de exclusión. El Grupo de Investigación se propuso iniciar su recorrido, planteándose, desde la pluralidad de perspectivas personales, y en el marco de una sensibilidad abierta hacia la globalidad de la necesidad de la formación para todos los seres humanos, no tratando de construir un tratado cerrado, sino un programa abierto aunque fuese incompleto. Inició su andadura haciendo preguntas. Todos los miembros del grupo presentaron cuestiones por las que, desde su personal preocupación intelectual, se consideraban interpelados. Entre ellas destacamos las siguientes: • ¿Cuál es la importancia de la teoría de la educación en el momento actual? • ¿Existen las ciencias de la educación? • ¿Cómo integrar lo filosófico y lo pedagógico en el pensamiento educativo? • ¿En qué consiste elaborar una teoría de la educación cívica? • ¿Condiciones o características que debe tener un problema para considerarlo problema educativo del que se encargue la teoría de la educación? • ¿Por qué los seres humanos necesitan cultura para vivir? • ¿Por qué la cultura necesita ser acreditada en las comunidades de prácticas? • ¿Cómo se hace un malvado? • ¿Qué puede aportar la teoría de la educación a la construcción de una cultura sostenible? • ¿Cuáles han sido las principales corrientes internacionales de la teoría de la educación? • ¿Qué diferencia hay entre lo que hace un maestro y un músico cuando intentan enseñar música? • ¿Dónde está la cualidad educativa del trabajo de un profesor? • ¿Cómo cambia la concepción de aprendizaje en una cultura digital? • ¿Qué teoría de la educación y visión de ser humano para qué desarrollo? • ¿Hay una teoría de la educación para la educación no formal? • ¿Cuál es la teoría educativa que explica los procesos en los ámbitos no escolarizados? • ¿A quién le sirve la teoría educativa, al docente o al estudiante? • ¿Cuándo el formador de formadores está preparado para un cambio de actitud? • ¿Tiene vigencia la estructura escolar tal y como la conocemos? • ¿Hacia dónde va la educación? • ¿Qué factores determinan los cambios educativos en la actualidad? • ¿Cuáles son los marcos explicativos sobre el fenómeno de la educación y cómo han evolucionado? • ¿Es el discurso teórico educativo objeto de discusión de todos? • ¿Cobertura o calidad de la educación? • ¿Calidad u oportunidad educativa? Desde este listado de numerosas preguntas se discutieron afinidades y se decidieron 9 temas sobre los que centrar el texto: el primero de ellos gira en torno a los fundamentos y al desarrollo del pensamiento en educación; el segundo se centra en los aspectos antropológicos implicados en una teoría de la educación; el tercer capítulo versa sobre la construcción histórica y el reto actual de la teoría de la educación. Por su parte, el capítulo cuarto cifra su reflexión en el discurso teórico de la educación ambiental, centrándose el capítulo quinto en la teoría de la educación contextualizada en la Sociedad de la Información y el Conocimiento. El capítulo sexto hunde sus raíces en la problemática que gira en torno a la gestión del cambio y la innovación en educación; la especificidad de la función docente y las relaciones entre conocimientos temáticos y conocimientos pedagógicos es la temática que da cuerpo al capítulo sétimo, siendo el capítulo ocho fruto de diversas reflexiones e investigaciones en torno a los conceptos de inclusión y exclusión teniendo el derecho humano a la educación como hilo conductor. Termina el libro con un capítulo dedicado a la complejidad de los conceptos de cobertura, calidad y equidad en educación. El objetivo del libro ha sido el de re-crear un conocimiento en teoría de la educación, fruto de las investigaciones y experiencias propias de cada uno de los miembros del equipo en nuestros respectivos campos y grupos de trabajo, para así comenzar a construir un conocimiento compartido con posibilidad de transferencia. El fruto final que presentamos, base de todo el proceso que queda por desarrollar, son las diferentes respuestas a una batería de preguntas que hanservido de antesala, no sólo al primer libro que hemos hecho conjuntamente sino, sobre todo, a lo que será la futura transferencia de conocimiento por parte de este grupo de investigación. Sólo nos queda agradecer a la AECID el apoyo prestado sin el cual este texto y sus futuros lectores nunca se hubieran conocido. (shrink)

Este trabajo analiza la situación laboral de los trabajadores inmigrantes de origen extranjero en las áreas rurales vascas. Un escenario que se aleja en gran medida de la ruralidad más decadente y muestra un espacio social y económico dinámico. Asumiendo la motivación laboral como factor de asentamiento de la población inmigrante en este territorio, se establece un análisis estadístico comparativo entre la población inmigrante y la población local en relación con los principales indicadores de trabajo y las actividades económicas en (...) las que se insertan ambos colectivos. Los resultados reflejan una realidad laboral fragmentada, que permite identificar dos mercados de trabajo paralelos en función de su desigual vinculación con el empleo. Esta posición más inestable de la población inmigrante en los mercados de trabajo rurales los convierte en actores más frágiles y vulnerables, poniendo en peligro su capacidad de arraigo en estas zonas. (shrink)

La pregunta por el sentido general del ser emerge, en situaciones críticas, como una indagación noética y existencial que descubre la condición finita y vulnerable del ser ahí. La pandemia Covid19 se ha convertido en el contexto social la oportunidad para pensar en la importancia del cuidado en donde, a raíz del confinamiento y el aislamiento preventivo, se ha modificado de forma infranqueable los ritmos de vida. La rapidación del mundo social de producción y consumo ha constituido el modus vivendi-operandi (...) de nuestras sociedades capitalistas. Por eso, los ritmos de vida acelerados han constituido la forma habitual del ser ahí en la carrera social hacia el éxito, consumada en una vida aparentemente feliz, sujeta a las tendencias del mercado y convirtiéndose, este imaginario colectivo, en el paradigma globalizado al cual aspira cualquier persona desde el nivel de vida o estrato social en que se encuentra. Los relegados del sistema, por su parte, quiénes no están a la altura de la competencia del capitalismo salvaje, se convierten en excedentes sociales postergados hacia el inevitable destino del desecho. Si queremos reivindicar el discurso del ser es en orden al fortalecimiento del cuidado de la vida, como un asunto primordial del ser ahí, para reconocer la raíz humana de la crisis ecológica porque, a la base de esta indagación fundamental se encuentra una deficiente cultura del cuidado que no es otra cosa que el descuido mismo del ser. El objetivo de este artículo, derivado de un proceso de investigación documental, es proponer, a la luz de los aportes de Martín Heidegger, la estructura fundamental de la cura como elemento consustancial de la vida en orden al cuidado de sí, de los otros y del ambiente natural como una respuesta oportuna a la crisis actual. (shrink)

Desde que se inicia el confinamiento hasta la actualidad, se dispara la inseguridad en el sector económico en general, situando en un estado aún más crítico a los colectivos sociales más vulnerables como las mujeres. Pondremos nuestro punto de mira y objetivo en el trabajo social y de inserción desarrollado con las mujeres migrantes riojanas durante la pandemia. Para ello, se llevará a cabo una revisión y análisis de datos socioeconómicos en base a las tasas de paro y (...) de empleo solicitados a fecha de 31 de diciembre 2020, considerando la proyección para el año 2021. A su vez, se revisará el trabajo de intervención desarrollado para dicho colectivo. (shrink)

El trabajo analiza un proceso de judicialización mediante acción colectiva bajo la tipificación de violencia contra la libertad reproductiva e institucional, y contra la obstaculización sistemática en el acceso a ligaduras tubarias de mujeres de sectores vulnerables en un hospital público de la ciudad de Córdoba-Argentina. El análisis presenta tres dimensiones principales, a saber, una dimensión jurídico-conceptual, una dimensión procesal y una dimensión de efectos de la judicialización.

El diálogo que a continuación presentamos a la comunidad de lectores y lectoras tuvo lugar el 20 de abril del 2021 en el contexto del primer ciclo de conversatorios “Masculinidades y emancipación en América Latina. Tiempos de crisis/tiempos de invención”, promovido por el colectivo de trabajo “Masculinidades en América Latina: Fricciones, Fugas y Fisuras”. Esta transcripción la editó y corrigió Daniel González Marín Grabación original del conversatorio en: https://www.facebook.com/masculinidades.friccionesfugasfisuras/videos/107791384769511.

Garantía Juvenil se configuró, tras la crisis económica del 2008, para ofrecer nuevas oportunidades de empleo y amortiguar la situación actual juvenil. Como objetivo, analizar si el programa ha conseguido alcanzar sus propuestas iniciales de inserción laboral en Granada. En los resultados, se pone en consideración las diferentes posibilidades de éxito tras la realización de la formación recibida.Para la discusión y conclusiones, presentamos la información del estudiantado después de finalizar su experiencia en el programa y que nos ayudará a comprender (...) si ha logrado mitigar los efectos adversos de la crisis económica y los altos índices de desempleo. (shrink)

En este ensayo nos proponemos realizar algunas consideraciones argumentativas breves sobre la ética en investigaciones con seres humanos vulnerables. Para ello, examinaremos el conocido caso de Tuskegee (Alabama), ocurrido entre los años 1932-1972, en el que 600 personas afroamericanas fueron inoculadas con sífilis sin su consentimiento. Luego, desde una postura crítica, abordaremos el caso desde tres perspectivas bioéticas. En primer lugar, lo analizaremos desde el plano jurídico-normativo, luego desde el principialismo formulado por Tom Beauchamp y James Childress, y finalmente, (...) desde el enfoque conceptual de la “vulnerabilidad”, referido a las poblaciones participantes en las investigaciones bioéticas. En efecto, nos centraremos en los miramientos que estos enfoques plantean de forma expresa, para realizar un análisis reflexivo sobre el necesario aspecto ético, requerido en el seno de toda investigación bioética con personas vulnerables. (shrink)

Digitalisierung ist die Transformation der Lebenswelt in quantifizierbare Daten bei gleichzeitiger Automatisierung. Sie ist damit auch ein Angriff auf die Materialität vulnerablen Lebens. Die Triebkräfte dieser Kolonisation finden im Dispositiv aus Politik, Wirtschaft und Wissenschaft zusammen. Im Ausgang von der Phänomenologie der Leib beschreibt der Beitrag die Durchführung dieser Imperative, die in eine Halbierung der Humanität münden. Im Anschluss an Bruno Latour wird über eine Politik der Postdigitalisierung nachgedacht.

La vulnérabilité due à l’âge ou à la maladie conduit à mettre en place des dispositifs juridiques de protection. La famille et le juge et, dans une certaine mesure, le notaire, en sont les acteurs traditionnels. La protection du patrimoine est une des dimensions non négligeables de cette protection assurée prioritairement par la famille du protégé, conjoint et enfants qui sont aussi ses héritiers et ses débiteurs d’aliments. En réexaminant la place assignée à chacun – famille, juge, notaire, professionnel – (...) dans un nouveau texte réformant la loi plus que trentenaire qui régissait jusqu’alors la protection des majeurs, le législateur a semble-t-il pris acte de l’évolution de la famille et d’une nouvelle perception de son rôle par les différents acteurs de la protection. Comme toujours, l’argent est un puissant révélateur de la place assignée à chacun dans la famille. Les règles récemment modifiées qui régissent la protection, notamment patrimoniale, de la personne vulnérable et qui organisent sa représentation ne pouvaient donc être totalement neutres sur ce terrain. (shrink)

Vulnerability and resistance have often been seen as opposites, with the assumption that vulnerability requires protection and the strengthening of paternalistic power at the expense of collective resistance. Focusing on political movements and cultural practices in different global locations, including Turkey, Palestine, France, and the former Yugoslavia, the contributors to Vulnerability in Resistance articulate an understanding of the role of vulnerability in practices of resistance. They consider how vulnerability is constructed, invoked, and mobilized within neoliberal discourse, the politics of war, (...) resistance to authoritarian and securitarian power, in LGBTQI struggles, and in the resistance to occupation and colonial violence. The essays offer a feminist account of political agency by exploring occupy movements and street politics, informal groups at checkpoints and barricades, practices of self-defense, hunger strikes, transgressive enactments of solidarity and mourning, infrastructural mobilizations, and aesthetic and erotic interventions into public space that mobilize memory and expose forms of power. Pointing to possible strategies for a feminist politics of transversal engagements and suggesting a politics of bodily resistance that does not disavow forms of vulnerability, the contributors develop a new conception of embodiment and sociality within fields of contemporary power. -/- Contributors. Meltem Ahiska, Athena Athanasiou, Sarah Bracke, Judith Butler, Elsa Dorlin, Basak Ertür, Zeynep Gambetti, Rema Hammami, Marianne Hirsch, Elena Loizidou, Leticia Sabsay, Nükhet Sirman, Elena Tzelepis. (shrink)

In this chapter, I examine the concept of vulnerability as a complex constitutive feature of human agency and argue that it is both a constraint on and a resource for practical reasoning. When discussed as an ontological feature of human agency, vulnerability is primarily understood as an aspect of embodiment, which is problematic in different respects. First, in relation to the situatedness of human agency, vulnerability indicates that human agents are subjected to contextual contingencies. Second, in relation to temporality, vulnerability (...) indicates that agents act in time and under the pressure of time. They are finite and produce finite and perishable actions, even though the longlasting effects of an action may survive the action itself. Third, in relation to corporal feature of agency, vulnerability is associated to suffering and frailty, insofar as bodily needs and desires represent both springs of and hindrances to rational action. Finally, in relation to the social nature of human animals, vulnerability indicates the susceptibility to be harmed, obstructed, undercut or manipulated by other agents These varieties of vulnerability are constituive features of human agency, which cannot be removed without removing what is peculiar and specific to human agency. Theories of practical reason are primarily concerned with constitutive vulnerability as a defect, and presume to offer normative guidance by adopting an idealized account of rational agency, which corrects or merely cancels the defective features of human agency. By contrast, theories of bounded rationality understand practical reasoning instrumentally, and thus are concerned with cognitive limitations of practical rationality, in particular with partial and perspectival information. However, the notion of “partial information” is inadequate to capture the complexities and significance of vulnerability, even in its restricted cognitive sense, which has to do with the agent’s situatedness. On the view I propose, instead, vulnerability is declined as a constitutive constraint on practical reasoning. Susceptibility to time constraints makes sense of the agents’ engagement in action and of their distinctive deliberative perspective. Susceptibility to bodily needs and desires tracks the normative relation between motivations and reasons for action, as well as the corporal roots of the agents’ efficacy in a perceived context. Susceptibility to others makes possible to broaden the scope and the modes of individual agency, by way of inter-action and shared agency. Rather than the source of problems and issues for rational agency, I take vulnerability to name the cluster of constitutive constraints that shape practical reasoning. According to the distinctive variety of Kantian constructivism I defend, practical reason is incomplete, rather than imperfect or defective. The completion of practical reason does not aim to correct or dissolve vulnerability, but deploys vulnerability as a resource to build up autonomy. This view accounts for autonomy as a normative relation among vulnerable agents, which develops in time. (shrink)

“Qu’est-ce que la reconnaissance de droits par l’action publique change à l’expérience sociale du handicap? (p. 5), voici la question posée par cet ouvrage. Quinze ans après l’adoption de la loi du 11 février 2005 “pour l’égalité des droits et des chances, la participation et la citoyenneté des personnes handicapées,” la France est-elle véritablement sortie d’une logique assistantielle “en faveur” des personnes handicapées? Celles-ci jouissent-elles de leurs droits à égalité avec les autres?...

Several foundational documents of bioethics mention the special obligation researchers have to vulnerable research participants. However, the treatment of vulnerability offered by these documents often relies on enumeration of vulnerable groups rather than an analysis of the features that make such groups vulnerable. Recent attempts in the scholarly literature to lend philosophical weight to the concept of vulnerability are offered by Luna and Hurst. Luna suggests that vulnerability is irreducibly contextual and that Institutional Review Boards (Research Ethics Committees) can only (...) identify vulnerable participants by carefully examining the details of the proposed research. Hurst, in contrast, defines the vulnerable as those especially at risk of incurring the wrongs to which all research ethics participants are exposed. We offer a more substantive conception of vulnerability than Luna but one that gives rise to a different rubric of responsibilities from Hurst's. While we understand vulnerability to be an ontological condition of human existence, in the context of research ethics, we take the vulnerable to be research subjects who are especially prone to harm or exploitation. Our analysis rests on developing a typology of sources of vulnerability and showing how distinct sources generate distinct obligations on the part of the researcher. Our account emphasizes that the researcher's first obligation is not to make the research participant even more vulnerable than they already are. To illustrate our framework, we consider two cases: that of a vulnerable population involved in international research and that of a domestic population of people with diminished capacity. (shrink)

In _Vulnerability and Critical Theory_, Estelle Ferrarese identifies contemporary developments on the theme of vulnerability within critical theory while also seeking to reconstruct an idea of vulnerability that enables an articulation of the political and demonstrates how it is socially produced.

The so-called European principles of bioethicsare a welcome enrichment of principlistbioethics. Nevertheless, vulnerability, dignityand integrity can perhaps be moreaccurately understood as anthropologicaldescriptions of the human condition. Theymay inspire a normative language, but they donot contain it primarily lest a naturalisticfallacy be committed. These anthropologicalfeatures strongly suggest the need todevelop deontic arguments in support of theprotection such essential attributes ofhumanity require. Protection is to beuniversalized, since all human beings sharevulnerability, integrity and dignity, thusfundamenting a mandate requiring justice andrespect for fundamental human (...) rights.Being a feature of all humanity, vulnerabilityis improperly extended to designatedestitute individuals and populations. Rather,they are in a state of fallen vulnerability,for they already are harmed in some way, andhave become deprived of their range ofcapabilities. These individuals are destituteand are no longer in command of theirfundamental human rights. They have lost thestatus of unharmed vulnerability;identifying them as susceptible – vulnerated andno longer only vulnerable – stresses thepoint that bioethics demands specific socialaction to palliate or remove their distress.When harm does occur – in the form of disease,for example –, individuals are no longervulnerable – for they have ceased to be intact–, they become susceptible to additionaldeprivations and sickness; integrity isdemeaned and dignity is offended, leading tostates of dysfunction that require specificremedial social practices, aimed at treatingand removing injuries.The main point this paper addresses is thatvulnerability – as well as dignity and integrity – are descriptive characteristics ofhuman beings qua humans, which are not normative in themselves, but fundamental enoughto inspire bioethical requirements of protection and respect for human rights in thewake of social justice. A clear distinction must be made in regard to human beings who areinjured by poverty, sickness, discriminating deprivations or suffer otherdestitutions, having ceased to be only vulnerable for they are no longer intact. Theseindividuals and populations require more than protection, their needs must be met byspecific care and remedial measures to be identified and instigated by bioethics quaapplied ethics. (shrink)

Introducción a la problemática jurídica actual, por R. M. Alsina.--La filosofía de la cultura, por Francisco Romero.--El sentido del derecho para la vida humana, por Juan Llambías de Azevedo.--El derecho como objeto y la ciencia del derecho, por E. R. Aftalión.--Las especies del saber jurídico (consideraciones de epistemología) por Manuel Río.--Posición cultural de las orientaciones políticas, por M. T. Ruiz Moreno.

Scientific and technological progress might change people’s capabilities or incentives in ways that would destabilize civilization. For example, advances in DIY biohacking tools might make it easy for anybody with basic training in biology to kill millions; novel military technologies could trigger arms races in which whoever strikes first has a decisive advantage; or some economically advantageous process may be invented that produces disastrous negative global externalities that are hard to regulate. This paper introduces the concept of a vulnerable world: (...) roughly, one in which there is some level of technological development at which civilization almost certainly gets devastated by default, i.e. unless it has exited the “semi-anarchic default condition”. Several counterfactual historical and speculative future vulnerabilities are analyzed and arranged into a typology. A general ability to stabilize a vulnerable world would require greatly amplified capacities for preventive policing and global governance. The vulnerable world hypothesis thus offers a new perspective from which to evaluate the risk-benefit balance of developments towards ubiquitous surveillance or a unipolar world order. (shrink)

El artículo que aquí presento elabora una concepción del colectivo ético aplicable al espacio urbano. Dicha concepción, que se puede considerar post-humanista, es elaborada a partir de una lectura de autores como Alfred North Whitehead, Gilles Deleuze, Bruno Latour o James J. Gibson. Esta concepción se extrapola a los espacios de la ciudad, considerando algunas aportaciones de la Arquitectura y la Geografía Humana. El propósito último es contemplar el espacio urbano como la sede donde distintos actores (humanos y no humanos) (...) emergen de consumo, intercambiando tanto sus agencias como sus condiciones de existencia y sus responsabilidades. (shrink)

One of the defining features of the capability approach to health, as developed in Venkatapuram's book Health Justice, is its aim to enable individual health agency. Furthermore, the CA to health hopes to provide a strong guideline for assessing the health-enabling content of social and political conditions. In this article, I employ the recent literature on the liberal concept of vulnerability to assess the CA. I distinguish two kinds of vulnerability. Considering circumstantial vulnerability, I argue that liberal accounts of vulnerability (...) concerned with individual autonomy, align with the CA to health. Individuals should, as far as possible, be able to make health-enabling decisions about their lives, and their capability to do so should certainly not be hindered by public policy. The CA to health and a vulnerability-based analysis then work alongside to define moral responsibilities and designate those who hold them. Both approaches demand social policy to address circumstances that hinder individuals from taking health-enabling decisions. A background condition of vulnerability, on the other hand, even though it hampers the capability for health, does not warrant the strong moral claim proposed by the CA to health to define health as a meta-capability that should guide social policy. Nothing in our designing social policy could change the challenge to health agency when we deal with background conditions of vulnerability. (shrink)

While some trust theorists have adverted to the vulnerabilities involved in trust, especially vulnerability to betrayal, the literature on trust has not engaged with recent work on the ethics of vulnerability. This paper initiates a dialogue between these literatures, and in doing so begins to explore the complex interrelations between vulnerability and trust. More specifically, it aims to show how trust can both mitigate and compound vulnerability. Through a discussion of two examples drawn from literary sources, the paper also investigates (...) the effects of pathogenic vulnerability on the psychic economies of trust and distrust. (shrink)

Epigenetics – the study of mechanisms that influence and modify gene expression – is providing unique insights into how an individual’s social and physical environment impact the body at a molecular level, particularly in populations that experience stigmatization and trauma. Researchers are employing epigenetic studies to illuminate how epigenetic modifications lead to imbalances in health outcomes for vulnerable populations. However, the investigation of factors that render a population epigenetically vulnerable present particular ethical and methodological challenges. Here we are concerned with (...) demonstrating how, in targeting certain populations for epigenetic research, this research may be pathologizing socio-cultural and medical practices in those populations in a way that increases their vulnerability. Using a case study approach, this article examines three vulnerable populations currently of interest to epigenetic researchers – Indigenous, autistic, and transgender populations – in order to highlight some of the challenges of conducting non-stigmatizing research in epigenetics. (shrink)

This article makes a contribution to the on-going debates about universalism and cultural relativism from the perspective of sociology. We argue that bioethics has a universal range because it relates to three shared human characteristics,—human vulnerability, institutional precariousness and scarcity of resources. These three components of our argument provide support for a related notion of ‘weak foundationalism’ that emphasizes the universality and interrelatedness of human experience, rather than their cultural differences. After presenting a theoretical position on vulnerability and human rights, (...) we draw on recent criticism of this approach in order to paint a more nuanced picture. We conclude that the dichotomy between universalism and cultural relativism has some conceptual merit, but it also has obvious limitations when we consider the political economy of health and its impact on social inequality. (shrink)

Over the last three quarters of a century, international guidelines and regulations have undergone significant changes in how children are problematised as participants in biomedical research. While early guidelines enacted children as vulnerable subjects with diminished autonomy and in need of special protection, beginning in the early 2000s, international regulatory frameworks defined the paediatric population as vulnerable due to unaddressed public health needs. More recently, ethical recommendations have promoted the active engagement of minors as research partners. In this paper, I (...) adopt a post-structuralist approach to policy analysis to examine deep-seated assumptions and presuppositions underlying the changes in the problematisation of children as biomedical research participants over time. While biomedical research ethics focuses on the autonomy and vulnerability of minors, ethical guidelines are situated in specific sociocultural contexts, shaped, among other things, by contingent public health needs and changing conceptions of the value of research and science for society. In the process, I demonstrate the challenge of moving away from an approach that in taking adults as the model overshadows the complexity of children’s lived experiences as well as their personal, cultural, and social lives. The lack of acknowledgement of this complexity makes children vulnerable to epistemic injustice, which is particularly crucial to address in public involvement initiatives. (shrink)

Despite the role of public health interventions in controlling disease transmission and protecting the public during the COVID-19 emergency, the implementation of quarantine restrictions has raised serious ethical concerns, especially in relation to the well-being of vulnerable populations. Drawing on the lived experiences of rural Chinese migrants who are subject to pandemic control, the authors highlight their inadequate capacities to manage the risks associated with the pandemic and adjust to quarantine restrictions. Informed by an ethical discourse of vulnerability, we show (...) that underpinning this group’s deficient coping strategies is a range of detrimental social structures and institutions that have developed under the persistent rural–urban divide in China. These structural constraints and pathologies expose rural migrants to serious risks and uncertainties while depriving them of the means and resources necessary to protect their own interests in the process of complying with quarantine restrictions. Understanding the plight of rural Chinese migrants as a structural problem also has implications for the global response to the COVID-19 pandemic. We further suggest a need for state intervention to mitigate structural deficiencies and empower the vulnerable during the COVID-19 era. (shrink)

The concept of vulnerability is widely used in bioethics, particularly in research ethics and public health ethics. The traditional approach construes vulnerability as inherent in individuals or the groups to which they belong and views vulnerability as requiring special protections. Florencia Luna and other bioethicists continue to challenge traditional ways of conceptualizing and applying the term. Luna began proposing a layered approach to this concept and recently extended this proposal to offer two new concepts to analyze the concept of vulnerability, (...) namely understanding external conditions that trigger vulnerability and layers of vulnerability with cascading effects. Luna's conception of vulnerability is useful, which we demonstrate by applying her layered view and the new analyses in multiple contexts. We begin by outlining Luna's view and we use vignettes from healthcare involving transgender patients, the care of patients in psychiatric contexts, and research involving prisoners to illustrate how each part of Luna's concept elucidates important moral issues. (shrink)

A key project in mainstream epistemology investigates the sense in which beliefs are vulnerable to knowledge-undermining luck and/or risk. This chapter will explore a related but largely overlooked question of how and to what extent our grasping connections between propositions is vulnerable to understanding- undermining luck and risk. The result will be a better view of how our attempts to understand the world are vulnerable when they are, and how to better mitigate against such vulnerabilities.

This essay explores how vulnerability, understood not as precarity but as capacious responsiveness, much as the Philosopher Judith Butler identifies it, and recognition are key moral concepts that are prior conditions for the expression of conscience. Appreciating Thomas Aquinas' argument that conscience is neither a power or a habit, but rather an act, the essay argues that Aquinas' inclination synderesis, that prompts us to the good and away from evil, functions in a way similar to vulnerability. Fundamentally, vulnerability prompts us (...) to recognize the neighbor who needs our response. (shrink)

Partiendo de la constatación de que el colectivo LGBTIQ+ sufre un contexto de discriminación y opresión sistemáticas, este artículo busca dar respuesta a este contexto desde el sistema universal de protección de derechos. Para ello, se explican los principios de igualdad y no discriminación como punto de partida para justificar un enfoque basado en derechos como la metodología pertinente para realizar una revisión de las provisiones específicas aplicables al colectivo LGBTIQ+ y realizar una propuesta de mejora, que incluye la aprobación (...) de un tratado específico que sirva para corregir la situación. (shrink)

What conditions of vulnerability must an individual face in order that we might ever correctly say that she or he has been wrongfully exploited? Mikhail Valdman has recently argued that wrongful exploitation is the extraction of excessive benefits from someone who cannot reasonably refuse one’s offer. So, ‘being unable to reasonably refuse an offer’ is Valdman’s answer to this question. I will argue that this answer is too narrow, but that other competing answers, like Alan Wertheimer’s, are too broad. I (...) propose a new answer, a “vulnerability clause” to partially comprise a theory of wrongful exploitation. In so doing, I appeal to Marilyn Frye’s account of oppression and take guidance from her inclusion and exclusion criteria. (shrink)

En este documento se intentará argumentar que los procesos de constitución de provisión de bienes públicos involucran necesariamente un problema de acción colectiva y que el diseño de políticas públicas son procesos de carácter esencialmente político y no técnico, como se promueve desde el neoliberalismo. De esta manera, para ser democráticos y pretendidamente no conflictivos deben ser necesariamente deliberativos.

‘Religion and corporeality’. At first sight, the coordinating conjunction «and» sounds rather odd here because in the vision of many people spirituality and materiality necessarily exclude each other. Still, many scholars have offered abundant evidence that Christianity is a religion of embodiment. Yet, as will become clear from the works of the theologians Erik Peterson and André Guindon, the turn toward the body within Christianity is primarily a turn toward a clothed body. This may explain why the Italian philosopher Giorgio (...) Agamben has argued that our culture, which is heavily influenced by Christian theology, is characterized by the impossibility of nakedness. In his view, we should try to think a possible nakedness of man by liberating it, piece by piece, from the theological fabric which is wrapped around it. The question that I want to raise here is whether such a naked nudity is really a human option. Drawing on Pope John Paul II’s Theology of the Body and introducing the notion of corporeal vulnerability, I will argue that it is not. (shrink)

In mental health policy, a central ethical dilemma concerns involuntary outpatient commitment (OPC), which aims to treat vulnerable individuals with serious mental illness who decline services. The first concern regards whether coercive services undermine the quality of clinical interactions within treatment, particularly as it relates to psychiatric medication use. The second concern is the unexamined role that OPC, and coercive psychiatric programs more broadly, play in the broader landscape of social welfare policy. To examine these concerns, the purpose of this (...) dissertation is to analyze how the management of psychiatric medications in involuntary outpatient services is undergirded by (a) provider and client interpretations of psychiatric medication effects and (b) moral discourses related to coercion and client autonomy. To achieve this aim, I examined data from a team-based ethnography that consisted of 1000 hours of participant observations and 56 semi-structured interviews with 20 clients, 21 providers, and 12 client family members with diverse backgrounds. I analyzed how medication compliance was discussed, monitored, and enforced in an involuntary outpatient program. My analysis demonstrates that medications were interpreted as a technology to control clinical symptoms (clinical control) though, particularly among clients, were also viewed as a method to control client mental experiences, behavioral expression, and autonomy (social control). Providers believed that medications were a necessary component of services (compulsory compliance) and could reduce client vulnerability to violence victimization and perpetration related to clinical symptoms (medicating vulnerability). To address client noncompliance, providers employed several strategies that I categorized as client manipulation. These strategies included providers, family members, and court officials strategizing ways to undermine client autonomy without clients’ knowledge (concealed collusion), deceiving clients into believing that medications were mandated when they were not (performing coercion), and minimizing the role of client consent and preferences in decision-making processes (circumventing consent). These findings demonstrate the pervasive role of manipulation to gain client medication compliance in OPC, which I named institutional coercion. They also highlight that the broader moral justifications for manipulating clients relate to their status as structurally vulnerable in their community settings and a growing relationship between the erosion of the welfare state and psychiatric coercion. (shrink)

Outsourcing clinical trials sponsored by pharmaceutical companies from industrialized countries to low- -income countries – summarized as transnational biomedical research – has lead to many concerns about ethical standards. Whether study participants are particularly vulnerable is one of those concerns. However, the concept of vulnerability is still vague and varies in its definition. Despite the fact that important international ethical guidelines such as the Declaration of Helsinki by the World Medical Association or the Ethical Guidelines for Biomedical Research Involving Human (...) Subjects by the Council of International Organizations of Medical Sciences refer to vulnerability as ethical principle, each of their approaches are different. To overcome these shortcomings, we analyze and unite different approaches of vulnerability and develop practical criteria in order to operationalize the concept especially for the context of TBR. These criteria refer to the context of a study as well as the characteristics and the current living situation of study participants. Based on a case study of an HIV-vaccine-trial conducted in India we demonstrate how those criteria can be applied in a retrospective way to identify potential ethical conflicts. The criteria can also indicate a prospective function for ethical pre-assessment. For this, we provide an outlook for three major topics: 1. Vulnerability as a normative concept: Different ways of protection; 2. The relevance of transparency and 3. Vulnerability as an instrument to increase decision participation of human subjects. (shrink)

Our study examines managerial vulnerability in a bureaucratic context, namely in Finnish immigration centres. We bring a care ethics perspective to the study of vulnerability and address how managers navigate relationships with vulnerable clients and their own vulnerability. Based on empirical data collected through interviews with immigration centre managers, we show how managers negotiated their (in)vulnerability through two alternating positionalities: (1) professionalism, through which they seek to control negative emotions in order to manage their own experiences of vulnerability and affective (...) relationships with clients, and (2) temporal disconformity, which provides space to engage and manage with a variety of emotions and manoeuvre bureaucratic professional norms. Our study then contributes to the literature on managerial work by demonstrating how managers cope with their vulnerable selves and how different notions of care emerge in complex, ethically sensitive managerial situations. (shrink)

This volume breaks new ground by investigating the ethics of vulnerability. Drawing on various ethical traditions, the contributors explore the nature of vulnerability, the responsibilities owed to the vulnerable, and by whom.

While human vulnerability has been discussed for some time in the contemporary philosophy and bioethics literature, animal vulnerability has received less attention. In this article, I investigate whether the concept of vulnerability, as it is currently used in bioethics, can be meaningfully extended to animals. Furthermore, I discuss the ethical implications of ascribing vulnerability to animals and I show what vulnerability discourse can add to debates on animal ethics. In a first step, I analyse the conditions of vulnerability ascription. By (...) taking as my basis the definition of vulnerability presented by Martin, Tavaglione and Hurst, I demonstrate that some animals fulfil the conditions of vulnerability ascription. I explore the ethical implications of vulnerability ascriptions in three domains: livestock farming, animal experimentation, and animals living in the wild. I argue that many groups of animals currently qualify as particularly vulnerable and should be afforded special protection so that they receive what they are due. I conclude by outlining the differences between vulnerability and sentience ascriptions: while sentience is a sufficient reason to ascribe moral status to a being, vulnerability draws our attention to those who are more likely to be denied what they are due. (shrink)

ArgumentMoreau (2019) has raised concerns about the use of DNA data obtained from vulnerable populations, such as the Uighurs in China. We discuss another case, situated in Europe and with a research history dating back 100 years: genetic investigations of Roma. In our article, we focus on problems surrounding representativity in these studies. We claim that many of the circa 440 publications in our sample neglect the methodological and conceptual challenges of representativity. Moreover, authors do not account for problematic misrepresentations (...) of Roma resulting from the conceptual frameworks and sampling schemes they use. We question the representation of Roma as a “genetic isolate” and the underlying rationales, with a strong focus on sampling strategies. We discuss our results against the optimistic prognosis that the “new genetics” could help to overcome essentialist understandings of groups. (shrink)

In this chapter, I examine the concept of vulnerability as a complex constitutive feature of human agency and argue that it is both a constraint on and a resource for practical reasoning. When discussed as an ontological feature of human agency, vulnerability is primarily understood as an aspect of embodiment, which is problematic in different respects. First, in relation to the situatedness of human agency, vulnerability indicates that human agents are subjected to contextual contingencies. Second, in relation to temporality, vulnerability (...) indicates that agents act in time and under the pressure of time. They are finite and produce finite and perishable actions, even though the longlasting effects of an action may survive the action itself. Third, in relation to corporal feature of agency, vulnerability is associated to suffering and frailty, insofar as bodily needs and desires represent both springs of and hindrances to rational action. Finally, in relation to the social nature of human animals, vulnerability indicates the susceptibility to be harmed, obstructed, undercut or manipulated by other agents These varieties of vulnerability are constituive features of human agency, which cannot be removed without removing what is peculiar and specific to human agency. Theories of practical reason are primarily concerned with constitutive vulnerability as a defect, and presume to offer normative guidance by adopting an idealized account of rational agency, which corrects or merely cancels the defective features of human agency. By contrast, theories of bounded rationality understand practical reasoning instrumentally, and thus are concerned with cognitive limitations of practical rationality, in particular with partial and perspectival information. However, the notion of “partial information” is inadequate to capture the complexities and significance of vulnerability, even in its restricted cognitive sense, which has to do with the agent’s situatedness. On the view I propose, instead, vulnerability is declined as a constitutive constraint on practical reasoning. Susceptibility to time constraints makes sense of the agents’ engagement in action and of their distinctive deliberative perspective. Susceptibility to bodily needs and desires tracks the normative relation between motivations and reasons for action, as well as the corporal roots of the agents’ efficacy in a perceived context. Susceptibility to others makes possible to broaden the scope and the modes of individual agency, by way of inter-action and shared agency. Rather than the source of problems and issues for rational agency, I take vulnerability to name the cluster of constitutive constraints that shape practical reasoning. According to the distinctive variety of Kantian constructivism I defend, practical reason is incomplete, rather than imperfect or defective. The completion of practical reason does not aim to correct or dissolve vulnerability, but deploys vulnerability as a resource to build up autonomy. This view accounts for autonomy as a normative relation among vulnerable agents, which develops in time. (shrink)

This paper aims to understand the relationship between ignorance and vulnerability by drawing on recent work on the epistemology of ignorance. After elaborating how we might understand the importance of human vulnerability, I develop the claim that ignorance of vulnerability is produced through the pursuit of an ideal of invulnerability that involves both ethical and epistemological closure. The ignorance of vulnerability that is a prerequisite for such invulnerability is, I contend, a pervasive form of ignorance that underlies and grounds other (...) oppressive forms of ignorance. Thus, undoing such forms of ignorance requires working toward a particular form of vulnerability: epistemic vulnerability. (shrink)

Vulnerabilities often characterize the availability of immigrant populations of interest in social behavioral science, public health, and medical research. Refugees, asylum seekers, and undocumented immigrants present unique vulnerabilities relevant to protocol development as well as ethics review procedures and criteria. This paper describes vulnerable populations in relation to the Belmont Report and US federal regulations for the protection of human subjects, both of which are commonly used in international research contexts. It argues for safeguards for immigrants comparable to protections for (...) such populations as pregnant women, prisoners, and children. The paper further presents a two-part model for the review of protocols that involve immigrants. The model is intended to help identify the risks to immigrants associated with participation in research, and to suggest how researchers can responsibly frame studies and access to research participant immigrants through community-based, and/or non-governmental organizations that serve immigrants and immigrant communities. (shrink)