Abstract
En este artículo se pretende plantear la posibilidad de una filosofía que useel género teatral como forma consciente de expresión, no solo para ilustraro hacer atractiva las ideas, sino para hacer propiamente filosofía. El diálogopermite establecer el desarrollo de ideas en forma de conflicto o de entrelazamientode acciones como una filosofía teatral. El debate filosófico quemuestra las circunstancias del encuentro de los personajes y cómo estas sedesarrollan, aunque solo sea implícitamente, construyen una filosofía dondelos hechos particulares se integran y, de ese modo, hacen posible un modoparticular de hacer filosofía.