Abstract
La vulnerabilidad narrativa, producto de la exclusión de los marcos de representación del contexto, que priva a algunos de ser vistos, escuchados y sentidos por la mayoría, implica la precariedad de amplias generaciones transformadas en “vidas fungibles”, esto es, en instrumentos vivos y animados de las máquinas de la guerra. Estos hombres y mujeres, empero, no son engranajes de la destrucción, sino seres con un nombre y una historia singular. Su capacidad de traducir narrativamente la realidad ofrece otro encuadre de interpretación sobre el pasado y el futuro a partir de su llamado a una nueva vida y al fin de la violencia armada. Aquí reside la propuesta de esta contribución, en la que, usando las reflexiones de Hannah Arendt y de Judith Butler, además de una entrevista a profundidad con un excombatiente colombiano en proceso de reintegración, se advierte en la narración la respuesta a la fungibilidad — la condición de existencias usufructuables, reemplazables y matables— de forma que se posibilita una vida biográfica, cargada de porvenir.