Abstract
La noción de intimidad tiene diversos orígenes y acepciones. En la tradición filosófica, Séneca, Agustín de Hipona, Lutero, Pascal, Descartes, Leibniz, Rousseau, Kant, Mill, Freud, Ortega y Zambrano concibieron la intimidad desde diferentes enfoques. Esta contribución dedica especial atención a Ortega y Gasset, porque vinculó ensimismamiento y técnica. Asimismo afirma una intimidad voluntariamente compartida que se desarrolla mediante relaciones íntimas en red. Sin embargo, algunos sistemas tecnológicos amenazan la intimidad. Es el caso de la inteligencia artificial promovida por el transhumanismo, que surgió con el programa NBIC. Transhumanistas tecnocientíficos de gran influencia mundial, como Harari, han defendido ideas particularmente peligrosas para la intimidad de las personas. Para combatir esas amenazas se requiere promover una intimidad compartida y en red. Asimismo hay que desarrollar la noción de tecnopersona, reinvindicando el derecho a la intimidad de las tecnopersonas en el mundo digital.