Abstract
La historia política de Rusia y España ofrece una oportunidad para comparar las medidas adoptadas durante la transición de un régimen autoritario a uno democrático, manteniendo la estabilidad política en el Estado. El Estado es un elemento central del sistema político. La estabilidad del Estado se convierte en una cuestión clave para los dirigentes del Estado, para los sujetos del poder político. La estabilidad política en una democracia requiere la preservación del tipo de organización del poder, que corresponde a los sentimientos e intereses fundamentales socioeconómicos de los grupos sociales. A los factores políticos de la estabilidad pertenece la posibilidad de una participación equitativa en la vida política para todos los estratos sociales, en conformidad con el derecho democrático y las tradiciónes, así como la presencia de las instituciones políticas. El Estado debe ser social y servir al ciudadano y a la sociedad. Se ha demostrado que el Estado debe participar en la regulación de la economía y la circulación monetaria. La estabilidad política en el nivel internacional se logra por el equilibrio multipolar y por la diversidad de los Estados soberanos y equitativos.