Abstract
En este artículo se revisan las coincidencias que genera, entre la filosofía política de Hegel y de Rousseau, el hecho de que estos dos filósofos afirmen que el Estado es el fin que debe alcanzar lo político. Tanto Hegel como Rousseau consideran que la nación es una condición necesaria para que se establezca el Estado; es decir, que debe generarse una identidad compartida en la comunidad para que ésta pueda ser institucionalizada correctamente. De manera que, aunque desde el punto de vista de Hegel la nación surge de un proceso histórico y para Rousseau proviene de las actividades y experiencias compartidas de un colectivo, ambos asumen un proceso fáctico que hace que sus teorías converjan de manera funcional a pesar de las diferencias conceptuales entre las mismas.