Abstract
Para San Juan de Ávila la salvación de las almas es el principal negocio de Dios que estará unido, dada su situación histórica, a la reforma de la Iglesia y de los pastores. La Iglesia y el sacramento del orden, tienen un origen y una realización concomitante, obran simultáneamente la salvación, ninguno de ellos es consecuencia del otro sino que ambos son en Cristo. El objetivo de este artículo es presentar la identidad eclesial del sacramento del orden desde la doctrina de San Juan de Ávila. Las consecuencias de esta reflexión sobre la identidad eclesial del sacerdocio nos llevará a comprender la profundidad de la doctrina avilista y saber enriquecer la actual reflexión teológica.