Abstract
Este artículo investiga dos problemas principales en los conocidos argumentos de San Agustín en pro de la certeza, contra los escépticos. En realidad, son más bien dos niveles de una misma cuestión "metodológica": la interioridad del conocimiento y la reflexión, como vía de certeza. Conclusión principal de este estudio es que ambas dimensiones son correlativas: la reflexión supone interioridad, N la interioridad exige reflexión, como ría de certeza. La última parte del artículo examina la doctrina agustiniana de la reflexión, en el contexto de su "filosofía del espíritu". La presente investigación intenta mostrar en este punto que, de hecho, San Agustín tematiza o supone, a lo largo de su obra tres grandes modos de reflexión, correspondientes a otros tantos modos de autoconocimiento del alma: el noticial, el cogitativo y el fenomenológico