Abstract
El autor trata de demostrar, apoyándose en los textos griegos, que la palabra filosofía no significaba, ni siquiera en los escritos de Platón, exclusivamente el amor al conocimiento desinteresado de la verdad, sino que tenía un matiz práctico: moral y político. A su vez, el nombre de metafísica, que sirvió para designar la disciplina más importante de la filosofía y para el conjunto de 14 libros escritos por Aristóteles, no sólo no provenía de este último, sino que también –como expresión griega– siempre aparecía en forma separada: ta meta ta physiká, y quedó unida apenas en la tradición latina. Su significado tuvo en la Antigüedad varias interpretaciones y, ciertamente, no fue un nombre casual