Abstract

Los autores intentan con este trabajo ofrecer una contribución al análisis de las difíciles problemáticas éticas que derivan de los trasplantes de mano. En el artículo se descrihe brevemente la historia del primer trasplante y el itinerario que ha conducido, en septiembre de 1998, en Lione, a este úpo de intervención. Se ha detenido en las conplicaciones nacidas inmediatamente que han obligado a fin de cuentas a la amputacián del miembro trasplantado, imputando las causas a una superficial valoración psiquiátrica del receptor. Este reciente tipo de intervención obliga a reflexionar, a causa de la novedad y de la particularidad del órgano trasplantable, sohre la oportunidad de aquellos trasplantes llamados "no salvavidas ", con base en los riesgos conocidos (que conducen una terapia inmunodepresiva a largo plazo. Esto lleva a considerar también el concepto de salud y principios de libertad y autodeterminación. También se ha interrogado sobre las modalidades de elección de los receptores y sobre el acercamiento más oportuno que hay que considerar respecto al nivel psicológico antes y después de la operación. Todas las recientes adquisiciones han sido valoradas en relación con aquello que imponen la legislación italiana y la deontología médica. Se ha hablado también de los vicios de un consentimiento al meno escasamente informado, derivado de la carencia de datos experimentales. A lo largo del artículo. los autores han evidenciado cómo pueden surgir numerosos interrogantes y obstáculos culturales inconscientes, además de morales, acerca de lo adquisición de un órgano que aparece visible más que otros, y que está íntimamente ligado a la propia identidad y personalidad, lo cual hace posible que sea percibido como extraño e intolerable por parte de algunos. En conclusión: los autores afirman que los candidatos ideales deberían ser jóvenes que han perdido recientemente ambas manos, sobre todo si se ha comprometido también la vista, mientras que poco razonable parece el trasplante en un amputado unilateral